Aquí vamos a participar todos. Vamos a crear un hilo de música, películas y libros. Lo que queráis, no vamos a censurar a nadie, aunque parezca mentira para unos rojos-machistas-leninistas como nosotros. Lo único, que hagáis un breve comentario de lo que habéis elegido. Empiezo yo, ya sabéis, el burro delante “pa” que no se espante: 

Como el otro día os hablé de la conquista de América y del determinante papel que tuvieron las enfermedades, quiero seguir por ese camino y poneros una canción que habla sobre la conquista y colonización de América. En apenas 4 minutos sintetizan lo que pasó, desde que llegaron (¿o deberíamos decir llegamos?) los españoles, las profecías indias que decían que llegaría un Dios por el mar, la posterior esclavitud a la que condenamos a miles de indios y el racismo imperante que se sigue produciendo, pues seguimos arrodillándonos delante de quien tiene perras y, sin embargo, cuando vemos a uno más pobre que nosotros ya nos lo miramos por encima del hombro. Todo eso nos lo cuentan en esta canción Gabino Palomares y Amparo Ochoa, y el título es La maldición de Malinche, que es como se llamaba la amante india de Hernán Cortés, y el link que os pongo es el directo que cantaron en 1983 en la plaza de la Revolución de Managua, la capital de la por entonces Nicaragua revolucionaria. Fue dentro del Concierto por la Paz, ya que en aquellos momentos los USA financiaban a la Contra, precisamente contra los victoriosos revolucionarios. En ese concierto se reunieron la flor y nata de los cantautores latinoamericanos: Silvio Rodríguez, Mercedes Sosa o los hermanos Mejía Godoy fueron algunos de los que cantaron aquellos días:

Bueno, esto solo tiene gracia si la gente vais enviando cosas. Ponerlo en los comentarios y cada día iremos subiendo lo que mandéis, dependiendo del aluvión de cosas que vayan llegando. Ah, y atención a la voz de Amparo Ochoa…

Jesús Ferrer

Hablando un día sobre la inmigración, me comentaban sobre que una parte de los países africanos siempre están en conflicto, sobre todo por motivos económicos y étnicos. Cómo no van a tener esos problemas si cuando los europeos nos repartimos el continente marcamos las fronteras como mejor nos convino.
Tiken Jah Fakoly en uno de sus más famosos temas, habla de ello. Por supuesto el resto del mundo no se escapa a algún tipo de reparto.

Se han repartido el mundo, ya nada me asombra…
Si me das Chechenia yo te doy Armenia.
Si me das Afganistán yo te entrego Pakistán.
Si no te vas de Haití, te voy a embarcar hasta Banguí.
Si tu me ayudas a bombardear Irak te arreglo lo del Kurdistán.
Se han repartido el mundo, ya nada me asombra…
Si me das el uranio yo te doy el aluminio.
Si me das tus yacimientos te ayudo a cambiar los talibanes.
Si me das mucho trigo haré la guerra a tu lado.
Si me dejas extraer tu oro te ayudo a echar al general.
Se han repartido el mundo, ya nada me asombra…
Se han repartido África sin consultarnos
y se sorprenden de que estemos desunidos.
Una parte del imperio Mandinga se encuentra en casa de los Wolof.
Una parte del imperio Mossi se encuentra en Ghana.
Una parte del imperio Sousso se encuentra en el imperio Mandinga.
Una parte del imperio Mandinga se encuentra en casa de los Mossi.
Se han repartido África sin consultarnos sin preguntarnos y sin avisarnos.
Se han repartido el mundo, ya nada me asombra…

Germán Ferrer

Con respecto a lo del reparto que hicieron, decía o dice, porque aún está vivo, el arzobispo sudafricano, Desmond Tutu, premio nobel de la paz en 1984 por su lucha contra el apartheid: «cuando el hombre blanco llegó a África, los negros teníamos las tierras y los blancos la Biblia, y nos dijeron: «cerrad los ojos y rezad». Cuando los abrimos, ellos tenían las tierras y nosotros la Biblia.»

Cristina Ferrer

Pues yo, hablando de inmigración y de África, voy a recomendar un libro, para que lo tengáis en mente o si podéis conseguirlo estos días.
El libro es «La flor púrpura» de Chimamanda Ngozi Adichie.
El libro trata de la libertad, y la autora, que decir de ella, alguien que se precie de conocer literatura feminista reciente sabrá que es la autora de «Todos deberíamos ser feministas», de «Querida Ijeawele: cómo educar en el feminismo» y de » El peligro de la historia única», tres pequeños ensayos que te dejan con sabor a más. Recomiendo con tesón la última, nadie somos el ombligo del mundo y nadie somos referente único.
La flor púrpura habla de la vida de una familia acomodada que parece ser perfecta, que sigue, por orden del padre, la fe cristiana con normas que impiden ver más allá…hasta que un día la hija y el hijo descubren la libertad. Y ya no habrá vuelta atrás.
Cómo no la hay para nadie que se aventura a indagar en ella.
Aprovechemos está cuarentena para aventurarnos para con ella, quizás no queramos probarla, quizás, ya nunca queramos dar un paso atrás.

Mónica Serrado

A mí al leer a Germán sobre la conquista de América, me viene al recuerdo una canción «La conquista» de Mago de Oz.
Es una canción que aparece en el disco- libro » Gaia» es el primer álbum de lo que después seria una trilogía.
Ya sé que quizás el folk- metal no es el tipo de música que guste a mucha gente, pero en estos álbumes hay letras muy bonitas y comprometidas que valen la pena escuchar, destacar también «La venganza de Gaia».
En aquellos años tenían una puesta en escena impresionante, en el caso de este primer álbum iban vestidos de corsarios y el escenario era un gigantesco barco de vela con sus cañones.

Este es el link de la canción:

https://m.youtube.com/watch?v=qQ1oP1yS4fg
¡Que buenos recuerdos!
Salud para todos.

Óscar Senar

‘The Private Eye’, de Brian K. Vaughan, Marcos Martín y Muntsa Vicente

Contigo empezó todo. O por lo menos, con ‘The Private Eye’ empezó a funcionar la plataforma Panel Syndicate, creada por Bran K. Vaughan y Marcos Martín. Con este primer trabajo demostraron que publicar cómics on-line de forma independiente a las grandes editoriales era arriesgado, pero no una locura. La prueba: le han seguido otros éxitos como ‘¡Universo!‘, de Albert Monteys, o ‘BlackHand IronHead‘, de David López, ambos también muy recomendables, disponibles en la misma plataforma y respaldados por una posterior edición en papel. ‘The Private Eye’ es una historia distópica (¡eh, mira, como nuestro presente!) que imagina un futuro en el que, tras explotar la nube de Internet y dejar a la luz los datos más íntimos de todos los usuarios, la privacidad se convierte en el nuevo valor fuerza de la sociedad. En este mundo, los periodistas, el Cuarto Poder, se convierte en la policía, y los paparazis son los detectives privados. Acción, género negro y mucho material para la reflexión.